La Agenda Metropolitana ha permitido el intercambio de experiencias y de buenas prácticas para la gestión de temas cotidianos.

Canelones es el segundo departamento más poblado de Uruguay con 485.028 habitantes, sólo después de Montevideo. Situado al sur del país, comunica a la capital con el interior. Es la sede del Aeropuerto Internacional de Carrasco y por ellos transitan gran cantidad de turistas y extranjeros por allí. Limita con Montevideo, San José, Florida, Lavalleja y Maldonado. Cuenta con una superficie de 4.536 km2,

Si bien Canelones cuenta con una zona metropolitana centrada en los servicios, donde destaca la presencia más significativa de las grandes superficies de comercialización (supermercados e hipermercados) del país, el Departamento se caracteriza por ser proveedor de alimentos de origen pecuario y agrícola tanto para el país como al extranjero.

El día 29 de julio de 2005, los Intendentes Municipales de Canelones, Montevideo y San José, acordaron implementar un Programa interinstitucional a fin de avanzar en el desarrollo local sustentable, en forma articuladora e integral. Agenda Metropolitana es un proyecto de gestión compartida que tiene entre sus aspiraciones profundizar la descentralización.

La Agenda Metropolitana, es el espacio más institucionalizado de trabajo en común a nivel de departamentos uruguayos y ha permitido el intercambio de experiencias y de buenas prácticas para la gestión de temas cotidianos.

Con un mejor aprovechamiento de las inversiones públicas y privadas es posible gestionar de manera integrada y sustentable los recursos de Área Metropolitana, a través de la investigación, el diagnóstico, la coordinación y la implementación de acciones conjuntas.

Como área metropolitana los principales problemas que existen se relacionan con la capacidad de gestión común en los temas de transporte pero obviamente no se reducen a eso. Gracias a esta agenda ha sido posible llegar a acuerdos en distintas áreas como: fomento a la producción artesanal de alimentos, la entrega del boleto de transporte gratuito a los jóvenes del primer ciclo de la Educación Media en los Departamentos de Canelones y San José, protección y promoción del uso racional de los recursos de la cuenca del río Santa Lucía y sus humedales y Lago de Paso Severino. En este caso, los tres municipios trabajan en común para preservar ambientalmente el área, pero además proponiendo alternativas de desarrollo local.

Uno de los acuerdos estrella de esta Agenda Metropolitana es el trabajo integrado entre el Ministerio de Transporte y Obras Públicas y delegados de las tres intendencias en el diseño de un Sistema de Transporte Metropolitano.

Los resultados han sido satisfactorios, desde fines de 2006, la extensión de líneas y la creación de combinaciones permitió bajar el precio del boleto y la mejora en el servicio para la quienes viven fuera de Montevideo. Además, se implementaron sistemas de GPS (sistema satelital de posicionamiento global) para el control de frecuencias y recorridos de transporte y tarjetas inteligentes como nueva forma de pago.

Para identificar los temas más sensibles y que requerían de mayor atención, durante la campaña política y en los momentos previos a iniciar la administración hubo una elaboración programática a través de una recorrida por el departamento, donde se evaluaron los problemas existentes y se recogieron las opiniones de la población a fin de distinguir cuáles son sus necesidades más urgentes. Sobre esas necesidades se construyó el programa de gobierno que, luego, se ha ido enriqueciendo con el aporte de técnicos que dan cuenta tanto del problema como de las propuestas de soluciones más factibles.

El departamento de Canelones, desde hace algo más de dos años, desde la administración de Marcos Carámbula, ha apostado también por la cooperación descentralizada. Es así que se han profundizado vínculos con Italia y España y que tienen una raíz histórica en la conformación de la población migrante que llegó a Uruguay y Argentina durante los siglos XIX y XX.

Con Italia existen convenios con la Comuna de Roma, Lazio, Piemonte y Abruzos para la generación de empleos, el desarrollo económico local y el intercambio de experiencias de gestión. Con España, existe cooperación con Andalucía, Galicia y las Islas Canarias, en áreas como desarrollo turístico, infraestructura y ordenamiento territorial. Por otra parte se han generado nuevas relaciones centralizadas, como con Canadá y con la Agencia de Cooperación Internacional del Japón, JICA.

La cooperación descentralizada es una oportunidad en la que los municipios sudamericanos miran con mucho interés experiencias como la francesa. En todo caso es necesario superar esta etapa de observación y avanzar en temas más concretos, especialmente, estudiar de qué manera las legislaciones vigentes contemplan la posibilidad de asociación. Cuando se comparan los consorcios que han emprendido algunas comunas en Francia para la gestión de temas particulares como la recolección de residuos, tratamiento de aguas servidas y otros, con la realidad de Sudamérica se observan tremendas carencias.

Asimismo, existen claras diferencias entre las realidades de Sudamérica para la cooperación descentralizada, en Argentina, por ejemplo, cancillería tiene una Dirección para la Cooperación Descentralizada; en Chile, existe la Agencia de Cooperación Internacional de Chile AGCI; mientras, en Uruguay no existe ninguna figura clara para este tipo de colaboración, si bien la cancillería tiene un Departamento de Cooperación Internacional, la cooperación descentralizada no ocupa un lugar particular ni se especifica en la normativa. A pesar de ello, las grandes necesidades y el espíritu de algunos gobiernos locales por la cooperación han abierto caminos para que ésta se pueda concretar.

Las mayores dificultades que se enfrentan se relacionan con esta falta de marcos jurídicos y principalmente con la falta de recursos para emprender estas relaciones. Los gobiernos locales tienen necesidades urgentes que satisfacer y este tema aún es relativamente nuevo, no tiene un lugar importante dentro de las prioridades de un departamento. Ante ello surge uno de los mayores desafíos para la cooperación descentralizada, el de concienciar y enseñar que esta relación entre pares vale la pena y que debe ser necesariamente beneficiosa para ambas partes. Con esa base podremos profundizar aún más en los intercambios.