Experiencia de manejo integrado de suelos y bosques a las prácticas de vida de las comunidades afro-atratenias

Los bosques del Chocó son de clima húmedo tropical pluvial con existencia de gran cantidad de ríos, quebradas, ciénagas y caños, con precipitación entre 8.000 y 10.000 mm, con temperatura promedio entre 28 y 36 grados centígrados; las altas precipitaciones hacen que se den inundaciones frecuentes.

Las comunidades negras, desde hace varios siglos, se han adaptado culturalmente a este medio y han convivido con las comunidades indígenas localizadas en las cabeceras de los ríos, compartiendo el territorio.

Tradicionalmente, han trabajado los suelos y bosques a nivel familiar, con el cultivo del cedro y agricultura en los diques, sobre la base del trabajo comunitario realizado en las ciénagas, los bosques y los rios, de donde se obtiene la pesca, las plantas medicinales, la caza, la mineria y la madera. Estas familias se han dedicado siempre a varias actividades.

Dentro de sus prácticas tradicionales de producción, están:

1. La agricultura, realizada de la siguiente manera: escoger el tiempo de la luna para obtener buena plantación y buena producción; utilizar la mano cambiada, o sea, todos trabajan un día o una semana donde una persona y así continuan la ayuda unos a otros para cosechar un año en determinada área. Recogida la cosecha, esta tierra se deja descansar al año siguiente.

La zona es de tierras fértiles, nunca se utilizan agroquímicos y usan como abono la "tumba" (árboles y ramas caidos), que se pudre y nutre la tierra.

2. Pesca: por lo general se utiliza para alimentación y en épocas de subienda, para comercializar pescado fresco y guardar provisiones de pescado salado para el resto del año. Existen unos reglamentos internos de las organización que regulan las medidas del pescado, de tal manera que no extinga. Utilizan para pescar redes y artes que no lesionan ni la composición del cauce ni a los animales pequeños.

El pescado lo conservan vivo, en cajas de madera, dentro del agua, hasta que se vende o se consume.

3. Madera: se utilizan los cambios de la luna para cortarla, teniendo en cuenta la talla o medida de que hablan los reglamentos internos. Se utiliza para construcción de vivienda, medios de transporte, transformación de las mismas y herramientas de trabajo.

4. Mineria: también existen reglamentos internos sobre explotación minera, actividad que se realiza con muy poca tecnología. Se hace un esfuerzo por impedir que foráneos introduzacan maquinaria en la zona, con la cual contaminan y alteran el ambiente.

5. Caza: la utilizan de vez en cuando para el sustento, tratando de evitar la extinción de la fauna.

En general el manejo de los suelos y los bosques está integrado al desarrollo de la forma de vida, donde la naturaleza se comprende como un todo con el que hay que relacionarse armónicamente. La recuperación de prácticas de vida permite integrar la asesoría técnica para ayudar a restablecer, mantener y preservar las condiciones prodigiosas de la región.

El impacto que han tenido estas prácticas tradicionales de manejo de la vida y la relación con el suelo y el bosque, han permitido la conservación y permanencia hasta el presente de los recursos naturales de generación en generación.

Los recursos naturales han sido el objetivo primordial de las comunidades porque son el fundamento de su subsistencia.

Con la conciencia que el proceso organizativo ha ido creando en las comunidades, se ha hecho el reglamento interno sobre manejo de los recursos naturales sobre la base de los usos familiares y comunitarios. Se ha logrado que el gobierno reconozca áreas de manejo especial hasta por 800.000 hectáreas (Acuerdo 20 de 1988).

El desarrollo de este trabajo tiene su punto máximo en el Articulo transitorio 55 de la Constitución Nacional y más tarde en la Ley 70 de 1993, Ley de las Comunidades Negras, que reconoce a estas como grupo étnico, con derecho a la propiedad colectiva de su territorios, Ley desde la cual se respalda la forma tradicional de utilizar los recursos.

En este momento se esta elaborando una propuesta de plan de manejo de recursos naturales y de política ambiental, que recoja todos los valores de las comundidades, para que el gobierno los avale. Las comunidades están dispuestas a seguir conservando los recursos naturales porque son la garantia de su supervivencia como cultura.