Las plantaciones
(Critères de soutenabilité forestière 6 Les plantations)
12 / 1993
En varios proyectos de plantaciones comerciales, como el que la empresa Simpson pretende llevar a cabo en el Sur de Veracruz, se ha observado una serie de problemas. No se trata de satanizar las plantaciones, sino de cuestionar el esquema que se maneja, considerando que existe vulnerabilidad en los sistemas no sólo ambientales sino sociales. Las comunidades y organizaciones, antes de pensar en involucrarse en un proyecto de este tipo deberían evaluar sus ventajas y desventajas.
En cuanto a la tenencia de la tierra, existen varios peligros, ahora agravados por las modificaciones a la ley agraria. Las necesidades de empresas como la Simpson han sido retomadas en la reforma al Artículo 27; la renta de la tierra es el mecanismo que esta compañía pretende usar para establecer sus plantaciones. Los campesinos ven en la renta un inicio de proceso expropiatorio; no preguntan "¿cuánto van a pagar de renta?" sino "¿qué nos van a dar a cambio de la tierra?"
Existe un peligro de enajenación por endeudamiento, y un riesgo de aglutinación agraria. El estableciento de módulos forestales de 50 has. en una región con parcelas de 10 ó 5 has implica compactar, agregar. Hay que contemplar también la gestión del territorio, el control. Pueden surgir contradicciones entre el modelo tradicional y el modelo "moderno" (por ejemplo, la restricción de derechos tradicionales). No quiere decir esto que no deban cambiar los usos y costumbres, pero que cambien sólo si los beneficios compensan el cambio.
No debería debilitarse el abasto alimentario, ni disminuirse las fuentes de empleo. La agricultura genera más trabajos permanentes que las plantaciones.
Los beneficios económicos no deben ser inferiores a los que se obtienen mediante los sistemas campesinos de producció n (el proyecto Simpson sólo ofrecía N$ 60 /ha /año de renta durante los primeros 8 años, y después ingresos por venta de materia prima N$ 450 /ha/año). Son estos raquíticos precios lo que permite que la producción de celulosa sea rentable para las compañías. Sólo el 3% del valor final corresponde al valor de la materia prima.
La cohesión comunitaria debe ser fomentada. Los proyectos de empresas como ésta manipulan a los sectores que en cada comunidad tienen mayor influencia. Así, los beneficios que pudi era haber serían acaparados por estos sectores.
La promoción de cualquier proyecto debe basarse en la honestidad y la veracidad. No hacer falsas promesas. En la documentación de un proyecto deben establecerse condiciones legales que garanticen a las comu nidades un poder de decisión. Esta participación debe plasmarse en el organigrama del proyecto.
Necesita además haber previsiones que asienten las responsabilidades de las partes en caso de retiro de la empresa o de cambio de mercado. En el caso de la S impson, la compañía podía retirarse cuando quisiera, en tanto que los ejidatarios debían avisar con tres años de anticipación.
Tomado de la exposición de Luisa Paré en el Seminario sobre Silvicultura Sostenible organizado en septiembre de 1993 por el Concejo Civil Mexicano para la Silvicultura Sostenible (CCMSS). Participaron: ERA, OEPF-Zona Maya S.C., GEA, PSSM, PRONATURA-Yuc., PAIR-UNAM, Red NOCAF, GIRA, UAG-Manantlán, CEA y EPOCA.
Compte rendu de colloque, conférence, séminaire,…
PARE, Luisa, CCMSS=CONCEJO CIVIL MEXICANO PARA LA SILVICULTURE SOSTENIBLE, 1993 (MEXICO)