La estrategia de FUNDAECO, de Guatemala, para obtener la categoría de área protegida para la Reserva del Cerro San Gil. Ficha 2 : Actividades de FUNDAECO, vínculos políticos y controversias

Para lograr que el Cerro San Gil fuera manejado como reserva natural, FUNDAECO capacitó a guardaparques contratados por la municipalidad y la Compania de Puertos Nacionales, desarrolló programas de educación ambiental dirigidos a las comunidades aledañas, desarrolló infraestructura local, realizó estudios socio económicos y ecológicos, y desarrolló un plan de manejo para el área. Éste detalla una diversidad de estrategias generadoras de ingresos que apoyarán tanto las comunidades aledañas como las iniciativas de FUNDAECO.

A la fecha, el principal obstáculo ha sido el reconocimiento oficial del Cerro San Gil como área protegida. Aunque la declaratoria oficial determina que el área está protegida por las leyes de Guatemala, ésta todavía no está vigente.

Para este propósito, FUNDAECO emprendió cinco acciones:

1)Ha revisado el estudio técnico inicial del Cerro San Gil y ha propuesto cambiar su condición de categoría 1, que estipula la protección total de todas las áreas boscosas, a la categoría 3, que lo designa como una reserva de uso múltiple bajo la regulación de planes de manejo específicos.

2)Ha solicitado cartas de apoyo de colegas de la comunidad científica nacional e internacional. Dichas cartas han sido remitidas al Congreso de la República.

3)Los funcionarios de FUNDAECO han sostenido reuniones con congresistas y responsables claves de la toma de decisiones del medio ambiente tanto a nivel local como nacional.

4)FUNDAECO ha utilizado intensamente los medios masivos de comunicación para informar y educar al público en general y ejercer presión pública sobre los responsables.

5)Ha desarrollado programas agroforestales y de educación ambiental para promover técnicas agrícolas, tanto para mejorar las condiciones del suelo como para educar a los residentes locales acerca de la conservación y la protección ambiental. Estas actividades han desarrollado credibilidad y apoyo local dentro de las comunidades ubicadas en las zonas de amortiguamiento de la Reserva.

VINCULOS POLITICOS Y CONTROVERSIA

Desde su fundación, FUNDAECO ha estado en el centro del movimiento ambiental de Guatemala y en un punto muerto con relación al foco de atención política. El hijo del expresidente Cerezo de Guatemala es uno de los fundadores, y actual Director Ejecutivo de FUNDAECO. Aunque FUNDAECO se ha beneficiado de este hecho, también ha sufrido las consecuencias de tener una figura política en la dirección de la organización.

Durante la administración Cerezo prevaleció un interés sobre el medio ambiente, que se plasmó en el desarrollo de legislación ambiental, la abolición de instituciones gubernamentales inefectivas y la realización de acciones ambientales conjuntas con diversas organizaciones.

Al dejar el poder la administración Cerezo procuró establecer convenios con la administración entrante para institucionalizar sus logros. No obstante, no sólo no tuvo éxito, sino que más bien se creó una atmósfera de persecución política contra Cerezo y sus iniciativas gubernamentales.

No obstante lo anterior, a FUNDAECO le fue posible establecer su propio nicho durante la administración Cerezo. Los antecedentes de FUNDAECO son un arma de dos filos: por un lado le permiten tener aceptación dentro de algunos círculos; pero también la hacen blanco de hostilidades y rivalidades políticas. Muchos acusaron a la organización de conspirar para confiscar tierras de propietarios locales. Los medios de comunicación divulgaron rumores infundados relacionados con los supuestos intereses y actividades de FUNDAECO. Los activos financieros de la asociación fueron congelados, y los líderes comunitarios locales con quienes FUNDAECO trabajaba fueron informados de que FUNDAECO estaba robando sus tierras.

En medio de la controversia, el movimiento ambientalista de Guatemala estaba siendo debilitado. La atención de los medios y los rumores estaban coaccionando a la gente a desconfiar de las organizaciones ambientalistas. Ninguna organización ambientalista salió en defensa de FUNDAECO, para evitar convertirse en sospechosa y sujeta del mismo abuso. Finalmente, la controversia alcanzó una coyuntura crítica cuando FUNDAECO fue casi sacrificada en aras de salvar el movimiento ambientalista.

Varios factores contribuyeron a sacar avante a FUNDAECO. Durante un año y medio FUNDAECO se retiró del foco de atención y continuó trabajando aisladamente en el campo. Esto contribuyó a establecer la credibilidad entre las poblaciones locales. El congelamiento de sus activos los forzó a ejercer una gestión organizada y conservadora y a planear cuidadosamente estrategias futuras sólidas.

Lenta y discretamente empezaron a restablecer su imagen. Realizaron actividades de cabildeo con congresistas que apoyaran las actividades de conservación. Comenzaron a lograr acceso a los medios masivos de comunicación para informar al público acerca de sus actividades. Para finales de 1992, FUNDAECO ya había, prácticamente, sobrevivido a lo peor. Sin embargo, los fuertes vínculos políticos de FUNDAECO continuan empujándola hacia el debate político y ambiental.

Esta experiencia enseñó a FUNDAECO una lección con respecto a la necesidad de realizar esfuerzos coordinados entre las organizaciones ambientalistas para asegurar que el medio ambiente constituya un asunto prioritario dentro del gobierno. Confían en que las contínuas presiones y las discusiones abiertas mejorarán su credibilidad y borrarán las percepciones negativas del movimiento ambientalista como idealistas de tendencia izquierdista con poco fundamento respecto a la realidad de las condiciones socio económicas. No obstante, su estrategia es difícil, por cuanto el interés en y apoyo a, las actividades conservacionistas no representan una prioridad para la administración actual.