Al origen de la violencia rural

La palabra "matanza" designa el asesinato simultáneo de más de 5 personas.

A pesar de que el número de víctimas sea reducido (1989: 45 matanzas; 1991: 174 víctimas)con respecto al número total de homicidios (1991: 9700 víctimas de las cuales 3700 por "motivos políticos"), las matanzas constituyen un modo de acción privilegiado de los grandes propietarios territoriales y revelan su deseo de "revancha".

La mayoría de los homicidios cometidos en medio rural ocurren en las zonas de fronteras agrícolas en las que se reunen los problemas de comunicación, la inexistencia de propiedad reconocida juridicamente, la falta física de instituciones estatales y también la producción y el trafico de droga. En los municipios en que organizaciones campesinas reivindican el acceso a la tierra, en los que las grandes propiedades territoriales son historicamente fuertemente consolidadas, o bien en aquellos en que dominan los minifundios, la cantidad de homicidios por municipio es generalmente, de manera paradojal, inferior al promedio. El análisis de la práctica específica de las "matanzas" conduce sin embargo a matizar esta observación.

A finales de los años 50, los grandes propietarios de las zonas montañosas ya habían utilizado la violencia para recuperar las tierras invadidas por los campesinos entre 1949 y 1953, tomando así lo que fue designado como su "revancha".

En los años 70, los campesinos de las regiones llanas y fértiles de la costa atlántica organizaron nuevos e importantes movimientos de invasión de las grandes propiedades. Actualmente, la casi-totalidad (94%)de las "matanzas" de campesinos ocurren en estas mismas zonas. Aprovechando este ámbito de terrorización (eventualmente creado con el apoyo de las bandas de sicarios de los narcotraficantes y de la extrema derecha paramilitar)los grandes propietarios reconstituyen sus territorios obligando a los campesinos a emigrar hacia las zonas de frontera agrícola.

El problema de las "matanzas" de campesinos y de la nueva "revancha" de los grandes propietarios territoriales es por lo tanto esencial para comprender el origen de la violencia en Colombia. En efecto, si bien la mayoria de los homicidios rurales ocurren en zona de frontera agrícola, el desalojamiento de los campesinos de las antiguas y más ricas regiones agrícolas "favorece la colonización caótica" de la frontera agrícola.