(Capitalisation: alterner les faits et la théorie?)
12 / 1993
La capitalización de experiencias es una de las numerosas formas de encuentro entre la teoría y la práctica, entre la reflexión y la acción. Casualmente, es el gran vacío existente entre el terreno y sus aprendizajes por una parte y los centros académicos y de decisión por otra lo que nos llevó a buscar puentes para el diálogo por el lado de la capitalización. Pero ¿cómo establecer concretamente el vínculo cuando se quiere elaborar y compartir las riquezas de la experiencia?
Usualmente nuestros document os separan claramente la práctica y la teoría. Los informes que tenemos que producir se dedican a los hechos, a las realizaciones concretas, y si se refieren a la teoría es para explicar o justificar alguna opción o algún cambio de óptica, rara vez para reflexionarla. Los trabajos que pretenden « ir más allá » priorizan a su vez una presentación teórica en la cual los hechos suelen entrar apenas a título de ejemplos o de « objetos de análisis ».
Cuando tratamos de apegarnos más específicamente a alguna expe riencia y de extraer sus lecciones, chocamos con la dificultad de ubicar los hechos y la reflexión, uno con respecto al otro. La solución más común consiste, entonces, en alternar, en un mismo capítulo, de uno a otro capítulo… Introducción teórica sobre las hipótesis iniciales, exposición (cronológica o temática) de la experiencia, interpretación y conclusiones, es así como procedemos con frecuencia.
Es bastante cómodo para los consumidores habituales de este tipo de literatura: cada quien va directam ente a las páginas que le interesan sin tener que recorrer el conjunto.
Pero es precisamente lo que bloquea en general al personal de terreno cuando desea capitalizar su propia experiencia: inmediatamente surgen normas implícitas o supuestas en cuanto a exponer objetivamente los hechos, en cuanto a situar su reflexión en el marco de las teorías existentes, etc. Separando los hechos y la teoría rara vez se logra estimular los aportes más ricos de quienes, dedicados a las tareas de terreno, se sienten excluidos de las delicadezas académicas, incómodos.
Por eso, al apoyar procesos de capitalización de experiencias, hemos buscado cómo reunir el pensamiento y la acción; escuchando los testimonios y debates del terreno creemos haber encontrado algunas pistas . Ahí la reflexión y la acción trabajan juntos, no alternándose sino con intensidades y prioridades diferentes según los momentos y las necesidades. El terreno más cargado de conocimientos es aquel en que se puede ver el pensamiento en acción dentro de lo cotidiano, es aquel en donde se descubre la teoría en gestación dentro de la práctica.
Entonces ¿por qué no ayudar a que este pensamiento se cuente a sí mismo, a que cuente sus acciones y las reacciones que ha provocado, a que cuente sus reflexiones pa ra adaptar mejor la acción futura?
Esta es la forma en que las gentes de terreno comparten entre ellas la experiencia y elaboran sus logros, en las conversaciones informales y en las reuniones. Es la forma en que les gusta escuchar lo que otros, lejanos, hicieron y aprendieron a su manera.
communication
, Amérique Latine
De lo que se trata es de romper las casillas entre reflexión y acción. Pero no es fácil cuando se trata de llegar a la publicación, es decir de ingresar al campo de los dueños de la teoría. La anécdota ha sido una de nuestras entradas para superar la barrera. Sin duda existen miles de otras brechas a agrandar.
Traducción de la ficha « Capitalisation : alterner les faits et la théorie »