Liliana Elizabeth DURAN AGUILAR
09 / 2002
Vidal PIno es ingeniero agrónomo. Ha hecho una maestría en Economía y Sociología en Francia. En su vida, ha tenido muchas experiencias. Desde la época estudiantil fue militante de Izquierda Unida, pero con el fuerte componente católico de la vertiente cristiana ligada a la teología de la liberación. Desde los 17 años hizo un compromiso muy fuerte con el campesinado. Trabajó muchos años en zonas de montaña, encima de los 4.000 metros sobre el nivel del mar, en crianza de alpacas y camélidos sudamericanos, compartiendo con los campesinos más pobres del planeta, gente cuya única base de alimentación era la papa en distintas formas, ’porque a esas alturas’, según nos cuenta, ’no crece otro cultivo que no sea la papa’.
Esa gente está abandonada totalmente en lo que se refiere a la salud, la educación y otros servicios. En la educación, por ejemplo, el caso de los maestros es emblemático para Pino Vidal. Comenta que los maestros rurales son dignos de admiración. ’Generalmente es gente muy mal pagada, que también ha vivido en condiciones infrahumanas. Sin embargo, ha dado su vida para que los niños indígenas puedan tener otras opciones’.
Vidal nos cuenta que ha visto a maestros al borde de la locura por estar encerrados en estos lugares tan aislados. Algunos de ellos se quedaban 5 o 6 meses sin bajar a la ciudad. Allá arriba no contaban con electricidad, tampoco tenían carreteras, por lo que tenían que subir a pie y necesitaban de entre tres y cuatro días para llegar a las comunidades donde trabajaban.
Igual mérito tenían algunos transportistas, que únicamente por dar un servicio a las comunidades, subían por estos caminos totalmente deshechos a recoger unos cuantos quintales de papas, llevar unos borregos y trasladar algunos comuneros hacia los pueblos.
Estos dos ejemplos ilustran las duras condiciones de la Puna peruana, donde Vidal Pino ha dedicado sus esfuerzos.
Ocongate es el nombre de la comunidad en la que se desarrolla su experiencia. Vidal cree que no existe otra población igual o más pobre que ésta, cuya realidad no cabe en ninguna estadística. Nos explica que hay zonas donde el modo de vida se ha quedado en la época prehispánica. ’Ahora los antropólogos se han dispuesto a estudiar esas zonas, tales como la comunidad de Quiko, a la que para llegar, se necesita un mínimo de una semana. No hay carretera, no hay forma de llegar más que a pie o en caballo’.
En esta zona, Vidal ha trabajado en un proyecto ligado a la iglesia. Se trata de la producción mejorada de camélidos sudamericanos, y la transformación de su lana. Con ella, las mujeres se han organizado en talleres artesanales para elaborar tejidos para la venta. Con estos nuevos ingresos la comunidad ha construido canales de irrigación para mejorar los pastos de los que se alimentan las alpacas.
También han logrado llamar la atención por parte del Estado : cuentan con una posta médica donde ya hay una enfermera, y en un centro un poco más distante, ’Arapos’, hay dos médicos.
Otra característica de esta zona es que los hacendados han arrebatado a los indígenas las tierras en las que han vivido durante siglos. Cuando el grupo de Vidal Pino empezó su trabajo en esta zona, a finales de los años setenta y comienzos de los ochenta, se comenzó a repartir tierras por la aplicación de la ley de reforma agraria.
Sin embargo, esta política ha sido mal aplicada, pues no se distribuyó las tierras a las comunidades, sino que crearon cooperativas que administraban la tierra. Estas cooperativas generalmente estaban dirigidas por los hijos de los hacendados. En definitiva, estas cooperativas hicieron que el régimen de la hacienda feudal se mantuviera, pues los campesinos simplemente eran jornaleros mal pagados de las haciendas, y estaban imposibilitados de acceder como dueños de las tierras.
El entrevistado comenta : ’Yo aquí tengo que decir a mucha honra y con mucho orgullo que hemos ayudado para que los campesinos puedan tomar la dirección de las cooperativas. Hemos logrado invasiones a las cooperativas; los campesinos se han organizado para invadirlas. Hay varios mecanismos para poder recuperar la tierra : a través de invasiones, a través de cooperativas, o a través de la compra, cuando ya los indígenas están en mejores condiciones de vida. Nosotros acudimos a la invasión’.
La recuperación de la tierra, para los indígenas no es solo el tenerla sino recuperar su dignidad. La actitud de las nuevas generaciones de indígenas que viven en Ocongate es totalmente diferente a la de sus ancestros. Estos últimos han vivido una nueva relación con respecto a la propiedad de la tierra, y no han tenido patrones, por lo tanto, se expresan y viven con seguridad y libertad.
El proyecto de Vidal reivindica la alimentación propia de los nativos de los Andes. Antes, era prohibido comercializar la carne de llama o alpaca, pues se consideraba que la alimentación de la gente del altiplano era perjudicial, la peor. ’Cuando un campesino iba con carne de llama o alpaca a los mercados de la ciudad, la decomisaban como si estuviese vendiendo un producto envenenado’, cuenta Pino. Ahora, la carne de alpaca, no solo que se ha comprobado que tiene un valor alimenticio muy importante, sino que es un producto de exportación. Lo mismo ha sucedido con el ’Chuño’(1) y la ’Moraia’(2). Todos estos alimentos son ahora muy apetecidos por la población mestiza del Perú e incluso de otros países.
Vidal salió de su trabajo en las montañas hacia finales de 1980, y decidió vincularse al Movimiento de Izquierda Unida para presentarse a las elecciones municipales de la ciudad del Cuzco, que tenía en ese entonces, unos 600.000 habitantes.
Esta época el Perú estaba atravesando por un período sumamente crítico. La tasa de inflación alcanzaba a 7.000 por ciento, los productos subían de precio todos los días, la capacidad adquisitiva de la gente era dramática. Además estaban amenazados por la guerra : por un lado tenían al movimiento guerrillero maoista Sendero Luminoso y por el otro, estaba el ejército. Ambos disparaban contra la población.
Vidal considera que ha habido alrededor de 30.000 muertos por esta guerra, cuyo eje ha sido la zona andina, la zona de montañas. En esas condiciones el equipo de izquierda gana las elecciones y asume la municipalidad. El cabildo del Cuzco atravesaba por graves problemas : el agua potable era insuficiente para toda la población, había problemas con la recolección de basura, la falta de transporte público era sentida por la población.
La Izquierda Unida estuvo al frente de la Alcaldía por dos períodos consecutivos. Lograron impulsar programas de apoyo alimentario, a través de clubes de mujeres que se organizaron en el ámbito de los barrios, o a través de distritos (parroquias). Estos clubes se organizaban de manera democrática. A sus representantes se les entregaba el combustible; y entre todos los miembros, compraron las cocinas y las ollas y se habilitaron comedores populares. Este programa ayudó fundamentalmente a la subsistencia y cohesionó a la población.
Aunque para los pobladores, estos programas fueran una alternativa para su vida, a los miembros de Sendero Luminoso no les parecían adecuados, por lo que han dinamitado muchos comedores populares. Vidal nos cuenta que ’en Lima, Sendero Luminoso ha asesinado a muchas mujeres dirigentes de los comedores populares’.
Otra prioridad de la gestión municipal de la Izquierda Unida en el Cuzco fue el agua potable. ’En la actualidad, el 95 por ciento de la gente que vive en la ciudad y sus alrededores tienen agua potable de calidad’, comenta Vidal con orgullo.
Con respecto a la basura, han logrado un programa de limpieza pública de la ciudad, que se encontraba en un estado calamitoso. Crearon la empresa municipal para la recolección de basura y logran recoger hasta 260 toneladas diarias de basura. Para disponer de ella, tienen un relleno sanitario, y han emprendido campañas de sensibilización hacia la población para lograr que seleccionen la basura y la reciclen. Con estas acciones, se ha podido recibir a turistas que desean conocer de cerca las poblaciones con historia del Perú
Otros programas emprendidos por la Alcaldía son la construcción de infraestructura para la ciudad, la adecuación de los mercados municipales, el apoyo a los comercios ambulatorios, la creación de la Caja Municipal, que otorga micro créditos a bajo costo para los pobladores.
lucha contra la pobreza
, Perú, Cuzco
Vidal Pino tiene experiencias muy valiosas : por un lado está su labor como ingeniero agrónomo, apoyando la supervivencia de los indígenas de la Puna, del altiplano más hostil. Su trabajo ha tenido una gran dosis de paciencia y una voluntad inquebrantable : poco a poco ha logrado incrementar la productividad en las montañas, pero sobre todo, la gente ha sentido que sus costumbres alimenticias son excelentes, son las mejores. Ahora obtienen beneficios económicos a partir del rescate de alimentos considerados ’lo peor’, hasta hace unos pocos años.
Este trabajo permanente, hombro a hombro con los comuneros, ha consolidado la dignidad de la gente, le ha permitido sentirse valorada en lo que ella es, y por lo tanto, asumir una actitud distinta frente a los retos que la sociedad moderna le quiere imponer.
Por otro lado, está su tarea como administrador de la ciudad del Cuzco, en medio de una crisis que no pudo manejarse a través de las políticas estatales. Con la participación de los ciudadanos, logró mejorar el nivel el vida y adecentar una ciudad importante dentro de la cultura y la historia del Perú.
La experiencia vivida por Vidal Pino, es una gran escuela de aprendizaje y formación humana para potenciar los conocimientos en favor de los demás.
Ficha realizada en base a la entrevista a Vidal Pino, delegado al Segundo Encuentro de Poblaciones de Montaña del Mundo, realizado del 17 al 22 del 2002 de septiembre, en la Pontificia Universidad Católica del Ecuador, en Quito. Mayor información en e-mail : pinovidal@hotmail.com
(1) Chuño es la papa deshidratada que los indígenas secan al sol para poder alimentarse en la época en que no hay producción
(2) Es la papa que se conserva en pozos de agua, con el mismo criterio del Chuño.
Entrevista con VIDAL, Pino, entrevista realizada entre el 17 y el 23 de septiembre de 2002
Entrevista
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