El concepto de agricultura sustentable y su legitimidad

El concepto de "sustentable", y de agricultura sustentable en particular, está en construcción. La gran heterogeneidad de organizaciones y grupos que comienzan a manejar el concepto hace que el significado cambie según quién lo usa. Por el momento no se trata de llegar a establecer una definición única, sino de usar el concepto de agricultura sustentable como una herramienta de trabajo que se irá afinando a medida que avance el trabajo y las experiencias concretas.

En términos generales el concepto no ha sido apropiado aún por la opinión pública. Entre las organizaciones campesinas prácticamente no se conoce el término. Curiosamente, entre las organizaciones populares urbanas el término es mucho más utilizado. Ciertos sectores del Estado comienzan a emplearlo, sobre todo funcionarios de la Secretaría de Desarrollo Social y Ecología que han estado involucrados en la elaboración de la Agenda 21 para México. El término que el Estado está difundiendo ampliamente es el de Ecología Productiva.

Donde más se ha utilizado el término de sustentabilidad es en el sector académico y entre ciertas ONGs que han incorporado la dimensión ecológica a sus preocupaciones, sobre todo a raíz del proceso de Río-92. Pero aún en esos sectores la agricultura sustentable se entiende de diferentes maneras.

Los asistentes al Taller sobre Políticas hacia una Agricultura Campesina Sustentable ven en el concepto de "desarrollo sustentable" una serie de implicaciones:

- Largo plazo: resolver las necesidades de la generación actual sin comprometer la capacidad de las generaciones futuras para solventar las suyas.

- Límites : las intervenciones humanas en el medio natural tienen límites impuestos por la propia naturaleza más allá de los cuales se agota el sistema.

- Integralidad: la regulación de la intervención humana en la naturaleza no se da sólo por preocupaciones biológicas o ecológicas sino que deben tomarse en cuenta los aspectos sociales, económicos, políticos y culturales.

- Participación: avanzar hacia sistemas más sustentables implica la participación de las poblaciones involucradas en la toma de decisiones.

- Prueba: la sustentabilidad de un sistema no se decreta o se da por buena voluntad, hay que probarla cuantitativamente y en el largo plazo.

Algunas posiciones (cf. las de la RMALC)plantean que hablar de sustentabilidad de entrada es hablar de la opción por un modelo de desarrollo.

En cuanto al término de "agricultura sustentable" se vio que éste no está más claro que el de "desarrollo sustentable" en general.