Surgimiento del ambientalismo rural en México

Dentro de la enorme diversidad de ONGs que existen en México, la ponencia se refiere a las que con una orientación progresista pretenden apoyar a los movimientos populares en el ámbito rural.

¿Cuándo surgen y cómo han evolucionado las ONGs en México?

Es a partir de los ’70s y sobre todo en los ’80s cuando se origina la mayoría de ellas. Surgimiento débil en comparación con otros países latinoamericanos, en gran parte por un un Estado corporativista, que tradicionalmente acaparaba una gran cantidad de espacios de la vida social, la asesoría técnica, administrativa, organizativa, la asistencia social, etc.

Sin embargo, a partir de 1968, y sobre todo desde el régimen populista de Echeverría, surgen grupos de apoyo de diversa índole; en ese inicio predomina la tendencia contestataria, que pretende propiciar vías de desarrollo alternativas a las que plantea el Estado. Desde entonces los grupos de apoyo se convierten en elementos más o menos importantes y casi omnipresentes en las luchas populares espontáneas o estructuradas; en el caso del movimiento campesino, los "apoyadores" aportan elementos técnicos, jurídicos o administrativos, o simplemente colaboran en lo que fuera necesario. Buena parte de los activistas de las ONGs proviene de los sectores medios, de personas vinculadas con la Iglesia progresista, universitarios y profesionales, ex-militantes, etc. aunque también hay gente del sector empresarial y grupos de carácter popular. Se caracterizan por no tener fines de lucro y por su orientación de servicio social, ya sea desde una óptica ético-religiosa, desde la filantropía o desde la política.

En el ámbito rural la acción de las ONGs se caracteriza por una incidencia en la escala micro, privilegiando el aspecto cualitativo sobre el cuantitativo. La forma de operar de los grupos es en base a proyectos que se desarrollan a escala local o en ciertos casos regional, y que en general pretenden fortalecer los procesos organizativos para afianzar la capacidad de las comunidades de auto-desarrollarse.

En los ochenta varias condiciones propician la aparición de nuevos grupos y el establecimiento de vínculos orgánicos entre las ONGs: en particular la profundización de la crisis, que golpea seriamente a los sectores populares y genera un proceso de "adelgazamiento" del Estado, y los terremotos del ’85, que fortalecen la conciencia de la sociedad civil respecto a sí misma y a su poder de transformación. Los grupos de apoyo empiezan a asumir el acompañamiento de las acciones de desarrollo emprendidas por las organizaciones campesinas, la asesoría técnica y administrativa, la investigación, la difusión y el apoyo organizativo.