Consejo comunitario Certegui del Chocó, en Colombia

El departamento del Chocó está ubicado al norooccidente de Colombia, a orillas del Océano Pacifico. Sus habitantes son indígenas y afrodescendientes y tienen una relación cultural y vital con la tierra, a la que protegen siempre. En este inmenso departamento, caracterizado también por la enorme riqueza en recursos naturales, se encuentra el municipio de Certegui, a 49 kilómetros de la capital, Quibdó.

A Certegui lo bañan dos ríos. Su población se dedica básicamente a la agricultura:siembra plátano, banano, ñame, primitivo (variedad de plátano), borojó, chontaduro, piña, yuca y otros alimentos; también labora en minería, en la extracción de oro y platino. La pesca y las siembras son los recursos del autoconsumo.

En 1993 se promulgó la ley 70 de 1993 que favorece a las comunidades negras mediante la creación de consejos comunitarios y la titulación de tierras colectivas. A partir de entonces se creó el Consejo Comunitario de Certegui, con el principal objetivo de titular las tierras que históricamente han pertenecido a estas comunidades y alimentar su identidad cultural, política, económica. Una de las funciones del Consejo es mediar en los conflictos territoriales e interétnicos que se presenten en la comunidad, solucionar problemas entre familias a causa de la tenencia de la tierra.

El Consejo comunitario muestra una actitud sólida en sus labores. En 1998, envió un proyecto de mejoramiento del comedor escolar conocido como Duque a la ONG inglesa Christian Aid, que en el mismo año aprobó el proyecto, del que se beneficiaron cerca de 80 niños. Hoy es el veedor de la construcción de una red vial cuya responsable es la firma Asfaltando Ltda. y que según Tomas Palacios, miembro de la comunidad, trae desarrollo al municipio y al departamento, ya que, según él, la carretera permitirá una mejor comunicación entre municipios.

Esa veeduría ha conducido a tomar medidas ante el incumplimiento de la firma, pues ya debía tener finalizada la obra. Además, porque le debe a la comunidad un poco más de noventa y cinco millones de pesos por el usufructo del proyecto. El Consejo ha emprendido acciones de cumplimiento, asesorado por un abogado y un ingeniero civil. Sin embargo, los organismos encargados de dictaminar una solución aún no se han pronunciado.

El Consejo además trabaja como organismo veedor de las retroexcavadoras que se llevan a las minas, para que cumplan con las normas de seguridad exigidas para excavaciones y para que se reparen los daños que puedan causar en el ecosistema.

Es decir, la protección que la ley 70 otorga a este grupo étnico crea un cierto poder en las comunidades.

Otros proyectos que el Consejo comunitario abandera son el remodelamiento del único centro educativo de secundaria que existe en el municipio, el Colegio Departamental Matías Tres Palacios, en el que estudian 600 estudiantes, pero en donde no existen baños. También se quiere crear una biblioteca especialmente para las consultas de los estudiantes. Junto a las carencias educativas esta además la de un centro médico que tenga la infraestructura básica para atender a la comunidad.

Hoy en día, el Consejo Comunitario de Certegui busca alternativas que contribuyan a mejorar la calidad de vida de su población y llama a los organismos estatales para que se acuerden de su comunidad y no solo de explotar los recursos naturales que existen allí.