La guerra sigue marcando la pauta, aún en las negociaciones de paz

De que paz se está hablando ? Que significa una salida negociada al conflicto armado en el país ? Estamos realmente frente a posiciones distintas para resolver el conflicto... "Una cosa piensa el alto gobierno, y otra las guerillas como las FARC (Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia), o el ELN (Ejército de Liberación Nacional), los militares, los distintos partidos políticos, los terratenientes o los campesinos. De hecho, y aunque todos enarbolen la bandera de la paz, cada uno está queriendo decir algo bien distinto con ella..." Esta falta de consenso ha sido una de las razones más aducidas frente al fracaso en la búsqueda de la paz, concretamente en lo que toca con la negociación entre el Gobierno y los grupos guerrilleros. Así las cosas, muchos elementos se imponen en la búsqueda de soluciones. Ellos van desde definir : qué se negocia ?, quiénes negocian ?, qué se acuerda ? y cómo se verifican las negociaciones? hasta los mecanismos (tiempos-espacios)para hacerlas viables. Sin embargo, este consenso no es posible alcanzarlo sin el reconocimiento del otro y de su papel en la configuración de lo socialmente legítimo. En este sentido, son bien importantes los cuatro elementos propuestos:

1. Un cambio en la visión que se tiene del "otro". Las condiciones del enfrentamiento llevan a que se considere al "otro" como enemigo absoluto... con un enemigo sólo cabe el enfrentamiento total.

2. La necesidad de reconocer la legitimidad y el poder real del "otro". La necesidad de que la guerilla acepte la legalidad del Estado como legítima (pese a la urgencia de reformas sociales y políticas). Y la necesidad de que el Estado, por su parte, acepte el caracter politico (no delicuencial)de la lucha guerrillera.

3. Aceptar de ambas partes que el monopolio legítimo de la fuerza descansa en el Estado, en cabeza de sus Fuerzas Armadas. La consecuencia de ésto es la ilegalidad de toda forma "paralela", paramilitar o irregular. Al mismo tiempo el acatamiento de la legalidad imperante por parte de las Fuerzas Armadas.

4. Finalmente la transparencia de los negociadores en el proceso. El rechazo al "doble juego": paramilitares/militares, de un lado y "combinación de todas las formas de lucha", del otro.