Abonamiento tradicional de suelos

Esta tecnología se realiza en la Comunidad de Huamanguilla, provincia de Huanta, Departamento de Ayacucho, ubicada entre los 2,800 y 3,400 metros sobre el nivel del mar, con una topografía variada y con pendientes pronunciadas en las quebradas; los suelos son variados diferenciados de acuerdo a los pisos ecológicos en arcillosos, calcáreos y limosos.

Abonamiento Tradicional de Suelos.

Los Materiales a utilizar son: animales domésticos, estacas de madera, soga, choza del guardián, pala y pico.

Procedimiento: Elegir las chacras más pobres para abonar después de la cosecha. Plantar las estacas en forma dispersa. Para los caprinos y ovinos se utilizan los corrales o canchas provisionales. En cada estaca sujetar con la soga a los animales luego del pastoreo, mantener la permanencia de los animales en la misma chacra durante 2 a 3 semanas, después rotar a los animales hasta concluir con el abonamiento; luego trasladarlos a otra chacra para continuar con los mismos pasos hasta el inicio de la siembra. Esparcir y desmenuzar el guano acumulado por los animales, es preferible regar y hacer el barbecho antes de la siembra para facilitar la pudrición del guano por efectos del agua y el sol; para luego preparar el terreno para sembrar maíz, trigo, arveja o haba. Desde la siembra hasta la cosecha amarrar los animales en forma rotativa alrededor de los cultivos, para aprovechar el guano acumulado que será incorporado al campo de cultivo por acción de la lluvia o el agua de riego. En caso de acumulación del guano amontonar o preparar un hoyo en la cabecera donde se depositará hasta el momento de su uso.

El guano para ser utilizado tanto en la siembra como en el aporque debe mezclarse con abonos químicos, de esta manera la chacra abonada absorbe mayor cantidad de agua, en el momento del barbecho y siembra el suelo es suelto y arable. Al sembrar maíz, trigo, cebada, arveja o haba en la chacra guaneada ya no es necesario incorporar más guano hasta la cosecha, salvo en pequeñas cantidades al momento del aporque. Con el obonamiento tradicional de las chacras se obtendrán buenas cosechas.