En la Ley de Pesca argentina no hay ni una coma escrita por los pescadores

La plataforma submarina argentina tiene una extensión de 1.890.000 km², a pesar de que es una zona muy rica en recursos pesqueros, la pesca tiene una participación marginal (2%) en el total de las exportaciones argentinas. El principal producto pesquero ha sido la merluza que, sobreexplotada en los años 90, hoy sufre una crisis poblacional.

El sector artesanal en Argentina carece del desarrollo que ha alcanzado en otros países de Latinoamérica, su contribución a los desembarques es menor al 2%. Su área de actividad abarca los golfos patagónicos, el canal de Beagle y la costa bonaerense.

Mar del Plata está ubicada 404 kilómetros al sudeste de la ciudad de Buenos Aires, es un centro pesquero dedicado a la extracción y manufacturación de conservas, congelado y fileteado de merluza.

Patricio Abate es pescador y directivo de la Cooperativa Lanchas Amarillas, integrantes de la Asociación de Pescadores de Mar del Plata.

Tiene 45 años de vida, 27 de ellos como pescador, proviene de una familia de pescadores donde la jornada de trabajo comienza entre las 4 y 5 de la mañana y se prolonga por cerca de 12 horas al día.

¿Cómo organiza su jornada laboral?

Los domingos no salgo, pero en realidad depende del mercado, no se trabaja los días de mal tiempo o temporal. La verdad es que se especula mucho con el tiempo atmosférico, tratas de programar tus funciones, incluso tu economía en función del tiempo. A veces es mejor quedarte a arreglar redes, armar cabos o hacer reparaciones. Es que salir a pescar tiene un costo alto, tienes que coordinar a tu gente, llamarla, tienes un gasto del principal insumo, el gasoil, puedes gastar o perder equipo de pesca, es un trabajo bastante especulativo.

¿Qué problema les aqueja más urgentemente?

El problema más urgente es el acceso a los recursos, es el más básico pero también el más urgente.

¿Cómo interviene el gobierno en este problema?

El gobierno apuesta a las empresas que más plata le dan para sus campañas políticas, no apuesta a la gente, no hay voluntad política en la práctica, sólo en el discurso. Lo realmente cierto es que las grandes empresas están poniendo mucha plata para las campañas políticas y en base a eso, después tienen acceso al secretario de pesca o a mejores políticas.

¿Existen instancias de participación para que puedan exponer sus problemáticas e inquietudes?

Son simbólicas, el Consejo Federal Pesquero, por ejemplo, es el que dicta las políticas pesqueras en Argentina, tiene representación de cinco provincias con litoral marítimo (Tierra del Fuego, Santa Cruz, Chubut, Río Negro y de Buenos Aires). Además están el Secretario de Pesca y la Secretaría Medio Ambiental que también tienen participación y voz. Pero los cinco consejeros han sido puestos por las multinacionales, todos han sido gerentes de grandes empresas, esto no es nada nuevo, ya son caras conocidas, de hecho ya hay un guiño entre nosotros, nos conocemos.

Pero ¿hay organizaciones sociales de pescadores que puedan representar sus intereses?

En Argentina, el grado de organización es mínimo, en un momento se quiso conformar una federación nacional, pero claro, sin presupuestos, ni recursos humanos porque no había gente dispuesta a trabajar en pro de esa organización. Tampoco hubo ningún apoyo del Estado, algunas ONG se mostraron interesadas en la creación pero no en ayudarnos. Hay que hacer que las federaciones funcionen, una federación de papel no nos interesa y al pescador no le favorece.

¿No debiera ser ese, entonces, el principal y más urgente desafío?

Es que, por ejemplo, en otra reunión posterior intentamos hacer federaciones provinciales que son muchos más fáciles, pero la Ley de Pesca Nacional sólo insinúa una definición de pesca artesanal. Cada provincia tiene la autonomía para decidir cuáles son las pautas para catalogar a un pescador como artesanal dentro de su territorio. Entonces, cómo puede conformarse un gremio, si cuando se hicieron estas reglamentaciones, cada una de las leyes provinciales determinó que para cada provincia la pesca artesanal es algo completamente distinto a la de al lado. Desde mi punto de vista, lo coherente es hacer uniones posibles, quizás más pequeñas, pero factibles. Debiéramos intentar copiar la capacidad de asociación y organización de los movimientos de agricultores y campesinos, ellos han superado esta etapa inicial.

¿Qué opciones manejan para poder generar las bases a una mejora en la actividad pesquera artesanal?

Como dije, las uniones factibles, y que el gobierno nos incluya en las tomas de decisiones de nuestro sector. Me parece una aberración que en cada una de esas leyes no haya ni una coma escrita por nosotros. ¿Quién las escribió? , un biólogo, un veterinario, un abogado o algún ingeniero, pero no hay ni un solo pescador, creo que eso es una locura y es el origen de los resultados que estamos viendo.